¿Por qué las fotos eran en blanco y negro?

Casi un siglo después de realizar la primera fotografía, las imágenes capturadas con el maravilloso invento de la cámara, continuaron siendo en blanco y negro. En la primera mitad del siglo XIX se producían los primeros estudios con resultados de lo que hoy conocemos como fotografía. Y, a principios del s. XX, los hermanos Lumière, con su “autocromo”, empezaron a aportar algo de luz a las fotografías. Hoy os hablamos de las fotos en blanco y negro y la evolución de las imágenes.

Fotos en blanco y negro

La respuesta a la pregunta del título del post es sencilla, porque no existía la tecnología que después llegó para obtener fotos a color. Pero el proceso y la evolución de la fotografía a lo largo de la historia es más complejo y os lo resumimos en este post.

Todo depende de la luz ya que, sin duda, es un elemento indispensable para materializar una imagen. Los primeros estudios se realizaron analizando el efecto que causaba la luz sobre el cloruro de plata. Nicéphore Niépce, considerado el padre de la fotografía, experimentó con su cámara oscura y logró reproducir imágenes de naturaleza. En 1835, se trabaja con láminas de cobre plateadas, un invento de Louis Jacques Daguerre. De su apellido surgió el nombre de esta técnica, el daguerrotipo. A través de un proceso bastante complejo, basado en vapores de distintos minerales para fijar la imagen, redujo los tiempos de exposición. Más tarde, llegaron el papel sensible a la luz, de Henry Talbot y otras técnicas y estudiosos que contribuyeron a la evolución de la fotografía. Hasta que en 1903 los Lumière consiguieron fijar el color en una foto y patentaron la fotografía a color.

Actualmente, sin embargo, las fotos en blanco y negro gozan de gran popularidad y atractivo para todo fotógrafo que se precie. La tecnología nos permite a través de softwares y apps, retocar imágenes desde el móvil incluso y aplicar efectos y filtros. Entre estos, muchos son en B/N o similares. Y, ¿por qué ese boom con las fotos en blanco y negro? Para empezar, son más “sinceras” al no disponer de color, que siempre maquilla errores, por lo que es un reto para el profesional. Es, además, el mejor modo de transmitir lo que el fotógrafo desea que exprese esa imagen. B/N o color… muchas veces, en la sencillez, está la elegancia. Además, también se utilizan filtros en blanco y negro, sepia, etc., porque lo vintage y lo retro, simplemente, está de moda.

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